Los seres humanos son animales que usan herramientas. La inversión de capital proporciona
dichas herramientas. En Estados Unidos, la inversión de capital ha aumentado cada año excepto
durante los pocos periodos de recesión severa. La inversión anual de capital en ese país ha aumentado
a una tasa anual del 1.5% después de deducciones y retenciones por depreciación.
La inflación y los impuestos elevan el costo del capital, haciendo que las inversiones de capital sean
cada vez más costosas. Cuando ocurre un descenso en el capital invertido por empleado, podemos esperar
una caída de la productividad.
El uso de mano de obra más que de capital puede disminuir el desempleo
en el corto plazo, pero también hace que las economías sean menos productivas y, por lo tanto,
que bajen los salarios en el largo plazo. La inversión de capital con frecuencia es necesaria, pero
pocas veces es un ingrediente suficiente en la batalla por incrementar la productividad.
Los intercambios entre capital y mano de obra están constantemente en flujo. Entre más elevadas
sean las tasas de interés, más proyectos que requieren capital son “eliminados”: no se emprenden porque
el rendimiento potencial sobre la inversión para un riesgo dado ha disminuido. Los administradores
ajustan sus planes de inversión a los cambios en los costos de capital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario